Cuesta lo mismo que el oro, casi 30 euros por gramo. Es una de las sustancias más exclusivas que pueden usarse para hacer perfumes. Y además es caca. Caca de cachalote, para ser exactos. Se trata del ámbar gris.
Las ballenas lo segregan en sus intestinos para protegerse de los objetos duros que no pueden digerir, como los picos de los calamares. Luego lo expulsan, y llega flotando a las playas, en forma de bolas grisáceas que arrastran las mareas. Si tienes la suerte de encontrar una de estas bolas, por medio kilo puedes conseguir hasta 15.000 euros.
Maravilloso, más de lo que puedes imaginar. Un olor que brilla, una joya olfativa. Una sola gota de tintura de ámbar gris puede convertir un perfume en una experiencia única.
Por supuesto, ninguno de los perfumes de las grandes marcas comerciales que se venden en la actualidad contiene auténtico ámbar gris. Algunos utilizan sustancias químicas que se aproximan a su olor, como el Ambroxan.
En Pressentia usamos tintura de ámbar gris como parte de nuestro repertorio de aromas. Es sólo una de las razones por las que los perfumes de Pressentia son distintos a cualquier otro que hayas probado.
En Pressentia diseñamos perfumes a medida. Cuando nos encargues tu perfume elegiremos para ti una combinación que se ajuste a tus preferencias y a tu carácter, y que no encontrarás en ninguna otra fragancia. ¿Prefieres un olor intenso, original y llamativo? ¿O mejor una fragancia cálida, acogedora y suave? ¿Una combinación de ambos? Puedes elegir los ingredientes o dejar que lo hagan nuestros perfumistas en exclusiva para ti.
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